Para deporte de riesgo, salir con un tullido. O al menos eso
debió pensar Reeva Steenkamp justo antes de fenecer a consecuencia de cuatro
balazos de su pareja, el archiconocido Oscar Pistorius. El sudafricano, atleta
olímpico y paralímpico, ha sido conocido hasta la fecha por su lucha contra las
adversidades y por ser "el pavo sin tibias que corre sobre ganchos".
Ahora, parece que su inaudita capacidad de superación le ha llevado a probar
suerte en la disciplina de tiro al blanco. Y claro, ¿¡qué mejor sitio para
comenzar a entrenar que en casa!?
"¿¿¿Qué te
guardas bajo la manga por tu amor para mañana???"
Reeva Steenkamp, modelo y diana casual, publicó en twitter durante
la noche del miércoles 13 una frase halagüeña como pocas en la víspera de San
Valentín, día de los enamorados. Pues bien, la duda ha sido despejada. Lo que
guarecía la manga de su enamorado era una Magnum de 9mm para pegarle tres tiros
en la cabeza y uno en la mano (este último un poco raro, ¿no?). 'Desayuno de
plomo, el plan romántico que se lleva ahora', casi suena a slogan publicitario
emanado de la perturbada mente de Bukowski. O uno de Mediaset, que esta gente
está muy sonada.
Osquitar, el tullido
celoso
La hermosa Reeva, todo dulzura y amor, decidió dar una
sorpresa a su mutilado compañero sentimental el día de San Valentín y
sorprenderlo con un bote de 200ml de lubricante sabor vainilla y menta. El
favorito de Pistorius para practicar sexo anal. Sin embargo, Oscar aseguraría
en su declaración tras ser detenido que confundió a su novia con un ladrón y
por eso disparó...4 veces.
No obstante, las versiones barajadas por la policía
sudafricana, en estrecha colaboración con el investigador y homosexual
reprimido Quim Domenech, apuntan a los celos como leitmotiv principal que llevó a Pistorius a darle al gatillo cosa
fina.
Por lo visto, mientras el atleta sudafricano se reventaba en
Londres con el doblete de Juegos Olímpicos y después Paralímpicos, ella
realizaba su particular tanda de sesiones maratonianas de orgasmos con Quinton
van der Burgh, conocido productor de TV.
De guepardo a gacela
Lo más cachondo del asunto es que cuando Pistorius descubrió
que su incipiente cornamenta superaba la altura de los ganchos que le permitían
correr como un felino, tuvo la brillante idea de amenazar a Van der
Burgh...¡con romperle las piernas! Eso es un trauma oculto y lo demás son
tonterías.
PD: Reeva estaba a punto de participar en un reality de
telebasura sudafricano llamado Tropika
Island of Treasure, junto a un montón de raperos gangsta y otras modelos
sexys. Si nos quedamos con el lado bueno de las cosas, ahora podrá participar
en el Heaven's Island of Lust,
donde podrá satisfacer sus lascivas necesidades fisiológicas y donde a buen
seguro no habrá raperos gansta.
La nueva línea de moda del Barça mola bastante |